La cúpula del edificio histórico del Capitolio está cayéndose en cantos por el desprendimiento del material de terracota de que está compuesto.

Las múltiples placas que sostienen los techos de los hemiciclos de la Cámara de Representantes y los del Senado están desprendiéndose.

La Plaza de San Juan Bautista, en el área norte del Capitolio, prácticamente flota en el aire porque sus bases están corroídas y su abandono es tal que su sótano se ha convertido en un recipiente de basura.

A eso se suma que el edificio anexo del Capitolio, que alberga oficinas legislativas, denominado Luis Muñoz Marín, pero mejor conocido como Medical Arts, está rodeado con un techo provisional de madera para proteger a empleados y visitantes de los continuos derrumbes de cemento de esa estructura, según evidenció El Nuevo Día durante un recorrido.

Ese es el cuadro en que se encuentran algunas de las estructuras que componen el complejo capitolino.
"Aquí se trabaja a base de cuatro años; se establece una prioridad en base a cuatro años y eso ha afectado el mantenimiento permanente de estos edificios", dijo el Superintendente interino del Capitolio, EKezer Velázquez.
Reconoció que bajo las presidencias legislativas de Antonio Fas Alzamora y Carlos Vizcarrondo se iniciaron varios proyectos de mejoras, algunos de los que actualmente están en curso.

Entre éstos mencionó la remodelación del sistema de "agua helada" que provee aire acondicionado a la estructura principal del Capitolio y las mejoras a los edificios anexos tanto de Cámara como de Senado.

Velázquez indicó que ya compartió con los presidentes legislativos un plan de mejoras para atender de inmediato el deterioro. El plan urgente consiste de 10 prioridades que incluyen la restauración de terracotas en la cúpula del Capitolio cuyo costo se estima en $115,000. Así como la de los techos de los hemiciclos a un costo aproximado de $150,000.

Igualmente, la remodelación de la Plaza San Juan Bautista que conllevará una inversión de $1.6 millones.
Pero ese plan excluye al edificio Medical Arts porque, según Velázquez se necesitarían cerca de $10 millones que su oficina no tiene disponibles.

Para ello se requeriría asignación legislativa. Velázquez comenzaría la implantación del plan este mismo año porque proyecta costear los gastos con una línea de crédito que heredó de la pasada administración y cuyo balance actual es de $10 millones. El costo total estimado del plan ronda los $4 millones.
 

Al edificio anexo Luis Muñoz Marí se le caen los pedazos continuamente.

Deterioro capitolino por falta de voluntad
Se carece de los fondos para mantener el edificio porque esto no ha sido prioridad.

Nota de la Editora: Este es el último de dos artículos sobre el abandono del Capitolio.

POR SANDRA MORALES BLANES
El Nuevo Día

¿A QUÉ SE ATRIBUYE el deterioro del Capitolio?

A la falta de fondos asignados para su mantenimiento y a que no ha sido una verdadera prioridad de las administraciones legislativas pasadas, admitieron el actual presidente del Senado, Kenneth McClintock, y los ex presidentes legislativos Antonio Fas Alzamora y Carlos Vizcarrondo.

La Superintendencia del Capitolio, encargada del mantenimiento de los edificios de ese recinto histórico, opera actualmente con un presupuesto de $10.2 millones para sus múltiples funciones, que incluyen, además, la seguridad interna del Capitolio.

Bajo la administración de Fas Alza-mora y Vizcarrondo se le asignó una línea de crédito para mejoras cuyo balance actual es de $10 millones, según el superintendente interino Eliezer Velázquez.

No obstante, tanto McClintock como los pasados presidentes legislativos admitieron que esa cantidad no es suficiente para las multimillonarias mejoras que requieren las edificaciones.
 

 "Se ha ido incurriendo en gastos de mejoras. Lo que pasa es que no puedes hacerlo todo de cantazo porque cuesta demasiado", dijo McClintock.

Cuando se le preguntó si sería prioridad el plan de mejoras de Velázquez así como la asignación de fondos a la Superintendencia para esos fines, aseguró que sí.
 

No obstante, señaló que el pueblo no puede esperar que problemas que vienen arrastrándose por años se resuelvan todos bajo su presidencia senatorial y la de su homólogo cameral, José Aponte.

"El Capitolio es como el aeropuerto. El trabajo nunca termina. Los cimientos de la Plaza San Juan Bautista, frente al Capitolio, tienen las varillas expuestas. Aquí, por la localización nuestra frente al mar, el salitre hace estragos terribles", señaló.

"La realidad es que esta es una estructura de unos gastos de mantenimiento y reparación contínua y cuando surgen éstas situaciones de marca mayor hay que hacer asignaciones especiales para eso y buscar personas especializadas porque son edificios históricos en su mayoría...", sostuvo el Presidente del Senado.

Pese a varias gestiones que se hicieron, el Presidente de la Cámara no estuvo disponible para este reportaje.

CRONOLOGÍA DE LAS ULTIMAS MEJORAS:
•  En el 1990 fueron restaurados los hemiciclos legislativos.
• En 1992 se restauraron las escalinatas.
• En 1997 se realizó la restauración de mármol, terracota y bronce de la entrada norte y sur del Capitolio.
• Del 1999 al 2003 se hicieron mejoras a la Plazoleta San Juan Bautista.
• En septiembre de 2003, una firma de arquitectos realizó por primera vez en años un censo del estado y condiciones de las terracotas del techo del Capitolio.
Fuente: Superintendencia del Capítolio.