Cementara bajo ataque otra vez

jueves, 7 de Abril de 2011

Por: Carmen Milagros Díaz

El Vocero

reclaman intervención del Gobierno por el polvo fugitivo

La empresa Antilles Cement / Elefante Rojo y sus afiliadas relacionadas a la operación y distribución de hormigón, varilla, cemento y concreto, nuevamente vuelven a ser objeto de quejas por contaminación en el área de Isla Grande donde ubican las instalaciones.
La Junta de Pescadores de La Coal, ubicada en Puerta de Tierra, pidió la intervención de las agencias gubernamentales para que investiguen al conglomerado de compañías porque los camiones que entran y salen en el área donde operan provocan el polvo fugitivo que llega al mar.
"El problema es que se contaminan las aguas y la vida marina que la habita. Ese polvo está sedimentado como una alfombra allá abajo (en el mar). La gente puede estar comiendo cemento sin darse cuenta y eso es un carcinógeno", expresó Efraín Santiago, presidente de la Junta de Pescadores de La Coal.
No es la primera vez que los ciudadanos y pescadores se querellan. En el pasado, cuando Antilles Cement se encontraba en el Muelle 12 en Puerta de Tierra, la nube de polvo fugitivo llegaba hasta el Capitolio y las comunidades circundantes se veían afectadas por problemas en las vías respiratorias y otras condiciones de salud.
La empresa Antilles Cement, Elefante Rojo y sus afiliadas como San Antonio Maritime y Concreteras de Puerto Rico podrían estar en la mira de la Junta de Calidad Ambiental (JCA), por la operación y distribución de hormigón, varilla, cemento y concreto en las instalaciones que se encuentran en el área portuaria de San Juan.
Por años, esta planta ha sido eje de controversias debido a los cuestionamientos ante los tribunales incoados por la JCA, la Administración de Reglamentos y Permisos y la Autoridad de los Puertos (AP). De hecho, esta última demandó a Antílles Cement por cobro de dinero y solicitó a los tribunales que se autorice el desahucio y expulsión de estas operaciones.
Estas agencias la emprendieron contra Antilles Cement argumentando que ésta operaba sin permisos, contaminaba el ambiente y adeudaba millones de dólares al Gobierno.
Por su parte, el presidente de la JCA, Pedro Nieves Miranda, expresó a EL VOCERO que "no puedo negar ni afirmar que están bajo investigación" por posible contaminación de aire o agua. Señaló que los efectos del particulado que se genera de este tipo de operación es considerado un contaminante que afecta las vías respiratorias y que la contaminación del agua corresponde a la violación de la ley federal.
"Sí, inspeccionamos este tipo de facilidad. No voy a divulgar la estrategia de fiscalización. Todo reglamento administrado por esta agencia se tiene que cumplir especialmente si hay permisos que tienen condiciones específicas con relación a eso (a contaminación). Y en eso la Junta es bien fuerte", señaló Nieves Miranda.
La última querella que la JCA recibió de esa compañía fue en el año 2005, Luego de esa fecha no se han recibido más querellas. "Eso no quiere decir que porque no haya querella no los visitamos", enfatizó el Presidente de la JCA.
Durante años, la zona donde están ubicadas las instalaciones de la concretera ha recibido una significativa inversión y desarrollo relacionados con el Centro de Convenciones de Puerto Rico, modernas edificios residenciales y comerciales, hoteles con casinos y facilidades turísticas.
La permanencia de la concretera no figura en los planos de desarrollo de esta zona. Como parte integral del contrato de arrendamiento entre Antilles Cement y la AP, figura el traslado y desmantelamiento de las operaciones de Antilles Cement /Elefante Rojo y sus afiliadas.
Mientras tanto, el director ejecutivo de la AP, Alberto Escudero Morales aseguró a este diario que, "ese problema ya se resolvió". Añadió que en los ocho meses que lleva a la cabeza de la Autoridad no ha recibido querella de la compañía, y que ésta cumple con todos los documentos y permisos que se requieren para el arrendamiento del terreno, incluyendo el endoso de la JCA.
El Vocero intentó obtener una reacción de Antilles Cement, pero no se logró la misma.