Dos manatíes heridos en Laguna de El Condado


lunes, 11 de septiembre de 2006

Por: Maricelis Rivera Santos
EL VOCERO


Dos manatíes heridos fueron avistados ayer por agentes del Cuerpo de Vigilantes del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) y la Policía en la Laguna de El Condado, incidente que ocurre tres semanas después de la muerte de otros cinco en la Bahía de San Juan por un choque con una embarcación.

El vigilante Domingo Leduc relató que observó a los dos manatíes, de unos ocho y seis pies de largo, con heridas en la cabeza, aletas y costado muy cerca del puente Dos Hermanos hacia el lado del hotel Caribe Hilton donde no es prohibida la entrada de motoras acuáticas.

"Las heridas no son muy cónsonas con el incidente anterior. Parece ser un incidente aparte con una lancha de menor calado", manifestó el director de la Red Caribeña de Varamientos, Antonio Mignucci Giannoni, en entrevista con EL VOCERO.

La descripción de las heridas que hizo Leduc dan a entender que no son frescas y que probablemente están cicatrizando, sostuvo el Director de la Red.

Leduc explicó que los manatíes parecían tener problemas de flotación y que estaban comiendo yerbas del fondo marino durante varios minutos. 

Mignucci Giannoni señaló que el rescate hubiera sido necesario si el comportamiento mostrado en el agua fuera en el sentido contrario en términos de la flotación.

"El hecho de que han ocurrido dos accidentes tan recientes nos deja saber que la severidad de la situación de los manatíes en la Bahía de San Juan es más seria de lo que habíamos documentado en el pasado", declaró el oceanógrafo.

Dijo que es evidente la necesidad de que se implementen medidas protectoras de forma urgente en toda la Bahía, incluida la Laguna de El Condado que es el área más usada frecuentemente por esos mamíferos marinos en peligro de extinción.

Leduc expresó que vecinos y pescadores del área le han dicho que los manatíes nadan allí todas las mañanas.

Sin embargo, no hay ningún letrero que avise a navegantes que el lugar es hábitat de esa especie y que deben reducir al mínimo la velocidad.

La parte de la Laguna desde el Puente Dos Hermanos al expreso Baldorioty está vedada a motoras acuáticas y embarcaciones de motor.

Durante la búsqueda, dos motoras acuáticas se acercaron por la entrada de la peña del perro a cierta velocidad, por lo que tuvieron que ser advertidos por la teniente del Cuerpo de Vigilantes, Leyda Alvarez Maldonado, de que existía la posibilidad de manatíes en el área para que procedieran a salir de la Laguna a menor velocidad.

Mignucci Giannoni exhortó a que se establezcan letreros que alerten a la ciudadanía y que el tramo donde se permiten embarcaciones pequeñas en la Laguna de El Condado se establezca un canal de boyas para que puedan entrar y salir del área sin añadir velocidad a los motores.

Los días 16 al 18 de agosto las autoridades detectaron cinco manatíes muertos con heridas hechas aparentemente por una embarcación de mediano a gran calado en la porción suroeste de la Bahía de San Juan.

La hembra y cuatro machos probablemente murieron en el mismo incidente que es investigado por autoridades estatales y federales, ya que la legislación en ambas esferas protege a esos animales por estar en la lista de especies en peligro de extinción. Los responsables pudieran ser penalizados con multas y prisión.

Los cinco animales constituyen el 1.5 de la población que se estima entre 300 a 350 individuos en las costas puertorriqueñas.

La Red mantiene en su piscina a Tuque, de un año, y otro bebé prematuro, de varias semanas de nacido, que fue rescatado en una marina en Fajardo.

Mignucci Giannoni indicó que si los dos manatíes avistados en la Laguna de El Condado hubieran requerido las atenciones de los voluntarios de la Red, no tendría dónde albergarlos.

En estos momentos, la Red necesita con urgencia un lugar para establecer una o dos piscinas para la atención de los manatíes rescatados antes de su regreso al mar. 

Se han iniciado conversaciones con el Municipio de Bayamón para auscultar la posibilidad de ubicarse en el Parque de las Ciencias donde además servirían como un atractivo para visitantes, único en Puerto Rico.